Anécdota de una presentación...

Creo que la mayoría de la gente se piensa que por tener un padre o madre conocido, en cierto ámbito, es "una bendición". No voy a negar que es lindo pero tampoco voy a decir que es fácil. Claro que todo depende, pero yo voy a hablar de mi caso... Se imaginan la presión que siento? Puede que sea por mi autoexigencia, sí, lo admito.
Desde pequeña, a los lugares que iba con mi padre todos me saludaban amablemente y típico comentario que le decían: "Ojalá que la niña te salga buena". Hombre, yo? buena? Pero por supuesto!!! Buena.... buena mandarina!!!

A continuación una conversación de hace mucho:
- Mi papá llama por teléfono a un amigo suyo porque yo necesitaba un bajista para mi banda: "Hola Pepito, mira, necesito que nos juntemos a charlar... mi hija necesita un bajista para su banda, tienen una presentación dentro de un mes..."
- Amigo de mi papá: "Claro José, no te preocupes, nos juntamos a tomar algo y hablamos. La semana que viene estoy por ahí".
Llegamos al bar. Nos saludamos y etc., etc.
Amigo de papá: "Así que la nena te salió buena eh?"
Papá: "Sí... Así parece!"
Pensamiento mío, mientras sonrío: [Claro, si salí a vos, desde que nací que vengo torturándome para ser tan buena como vos]
Amigo de papá: "Bueno, ya vamos a ver como toca... Sabés solfeo? Sabés leer? O es por oído?"
Yo: "Sí, sé leer con notas y con cifrado. También toco tablaturas y por oído también me defiendo"
Amigo de papá: "Perfecto!"
Papá: "Uh... vos no sabés cómo toca la guitarra!!! Y eso que estudió poquito tiempo. La verdad no sé cómo aprendió tantas cosas..."
Pensamiento mío: [Papáaaaa, callate la bocaaa!!! Deja de hacerme quedar bien, que después le llego a pifiar una nota y vamos a quedar los dos mal!!]
Yo: "Hago lo que puedo... Ah, y un detalle, no tenemos cantante tampoco. Tenía problemas con el estudio así que desistió. Pero ya voy a encontrar uno."
Amigo de papá: "No te hagas problema."

Listo, todo divino hasta acá. El grannn problema grannn fue encontrar un cantante disponible. Hablé con el novio de la hermana de una amiga mía, le gustaban los covers que hacíamos y se animó a probar. Le dí el micrófono, y adelante.

Primero: No sabía la letra de la canción y eso que le dí la lista de las canciones. Vale, vale... Se la imprimí. Listo? Sigamos...
Segundo: No sabía cuándo entrar. A ver... una canción super conocidísima y él no sabía. Habrán sido los nervios? Bombón, nadie te presiona, cantá tranquilo! Quéres un café? Un vodka? Ponete cómodooo pero no me hagas parar de nuevo el ensayo!
Tercero: Cantó... PERO desafinaba como la Calabró cantando "Libre". Naa... No podía ser! Ya luego de escucharlo cantar, las fichas que había puesto en él, desaparecieron. Y no me vengan con la excusa de que tiene 13 o 14 años y que pooobre... No, no. Esto para mí es así: o nacés para la música o nada. Bueeeeno, si no naciste, hacéte... pero si te hacés... que sea bien!!! Lo escuchamos cantar dos temas y ya para el tercero dijimos BASTA. Si te sigo escuchando cantar así (así de mal) mi vida corre riesgo (y la tuya también). Dedicate al fútbol, porque desafinás hasta cuando tocás el timbre.


Entonces... Nos quedamos sin cantante y la presentación se acercaba, ya nos habíamos comprometido. Le rogué al cantante que volviera pero estaba atontado con los exámenes, no tenía tiempo. Bárbaro... Cuál es la última carta que tenemos? Piensen... El bajista quiso que yo cantara y lo hice, venga sólo para los ensayos pero al final terminé cantando yo. Perfecto, no nos faltaba nada y nada nos podía pasar!!! Ah, no? Segura? Un día antes, UN día, en pleno ensayo me quedé sin voz, estaba cantando y subimos el volumen del amplificador porque creíamos que se había bajado pero no... no señores... me quedé sin vozzzzz!!!! No podía cantar, nooo!! Qué stress... Así que bueno, ese día desarmamos todo, cada uno a su casa y ya sola me puse a llorar como niño sin golosina. Qué broncón... Días enteros de ensayos, de arreglos, de invertir tiempo, para qué? Para que la boluda se quede sin voz.
Suspendimos la presentación pero unos meses después tocamos y dimos todo. Con cantante por supuesto. No podía arriesgarme a lo mismo. Una vez me pasa, dos no.